22 de noviembre de 2017
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Higienistas

Niños con necesidades especiales

Se presentan las características bucales que nos podemos encontrar ante pacientes especiales, las patologías más prevalentes, así como su manejo desde la clínica dental y las estrategias preventivas para evitar futuros problemas bucodentales.

Un paciente especial es un paciente que presenta signos y síntomas alejados de lo considerado “normalidad”, no tratándose solo de una persona que presenta una patología, sino que, como consecuencia de la misma, no puede desarrollar sus potencialidades en su vida y en su medio social y, por tanto, necesita de atención especial para su desarrollo diario.

La OMS define a una persona portadora de discapacidad como aquella que padece una alteración funcional permanente o prolongada; motora, sensorial ó mental, las cuales la hacen dependiente total o parcialmente de otros para sus necesidades básicas, implicando esto desventajas considerables para su integración familiar, social, educacional o laboral.

El 10% de la población tiene algún tipo de discapacidad y ¾ partes no reciben atención odontológica correcta.

Existen estos tipos principales de discapacidad, clasificadas según los ámbitos del ser humano que afectan:

1. Discapacidad mental:

  • Retraso mental
  • Síndrome de Down
  • Desórdenes del espectro autista

2. Discapacidad física:

a) Pacientes con limitación de la movilidad:

    • Parálisis cerebral
    • Pacientes UCI
    • Accidente cerebrovascular
    • Paraplejias

b) Pacientes con deficiencias sensoriales:

    • Auditiva
    • Visual

3. Enfermedades neurodegenerativas:

  • Distrofias muscuales
  • Enfermedad Huntington
  • Esclerosis lateral Amiotrófica
  • Enfermedad de Alzheimer
  • Parkinson

4) Alteraciones neurológicas y psiquiátricas:

  • Epilepsia
  • Esquizofrenia
  • Neurosis/Psicosis
  • Trastornos alimentarios: Anorexia, Bulimia

En estos pacientes hay una limitación motora o psicológica que desemboca en alteraciones orales.

El dolor y el malestar que provoca en estos pacientes las alteraciones orales, unido al riesgo de diseminación séptica que tienen, ya que muchos de ellos presentan enfermedades sistémicas y patologías orgánicas previas que cursan con un estado inmune previo alterado, condicionan la ingesta alimenticia que, agravado por su alteración conductual conlleva a un compromiso del estado nutricional del paciente que empeora aún más su relación con el entorno.

En muchos casos estos pacientes presentan alteraciones en la musculatura perioral y en las glándulas salivares presentando hipersialia o sialorrea, que vienen a complicar más el comprometido estado de salud oral y condicionan su tratamiento.

 

ABORDAJE DEL PACIENTE CON NECESIDADES ESPECIALES:

En función de la colaboración del paciente, y del grado de discapacidad del mismo, el equipo de salud deberá adoptar medidas para la atención odontológica en consulta que varían desde el control de conducta hasta la anestesia general.

Pero, sin duda, el tratamiento principal en estos pacientes es la prevención, para lo que hay que centrarse en la familia: prevención y promoción salud.

 

ATENCIÓN ODONTOLÓGICA:

  • Interconsulta con el equipo médico del paciente: Conocimiento de su estado, medicación y consecuencias de la misma.
  • Historia Clínica Médico-Odontológica
  • Interconsulta interdisciplinar: Intervención temprana en reeducación de funciones
  • Estrategias específicas  de acuerdo a la patología sistémica .
  • Prevención de endocarditis bacteriana cuando sea requerida.
  • Elección de la modalidad de abordaje odontológico integrando al niño a la situación odontológica.
  • Terapéutica con medicación no agresiva para la mucosa gástrica: normalmente son pacientes ya polimedicados.
  • Prevención de traumas y caídas en sillón.
  • Utilizar un lenguaje de menor complejidad, más lento y pausado
  • Hablar a nivel de los ojos
  • Mantener una actitud positiva
  • Plantear preguntas que puedan responder con un si/no, sencillas y cortas
  • Proporcionar información y apoyo al paciente de manera frecuente, adecuada e inmediata.
  • Emplear dibujos sencillos para explicar los procedimientos
  • No infravalorar ni sobrestimar las capacidades del paciente
  • No levantar la voz ni utilizar un lenguaje infantil
  • No usar mascarilla mientras habla con el paciente
  • Citas cortas, en el horario de la mañana

 

PROTOCOLOS PREVENTIVOS

DISEÑO DE PROGRAMAS DE PREVENCIÓN Y PROMOCIÓN

  • Control mecánico de placa
  • Control químico de placa
  • Control de la dieta
  • Promoción de la salud oral
  • Control hipersialia o sialorrea según el caso
  • Enseñanza al paciente
  • Capacitación a los padres o tutores.
  • Integración de los cuidados de la salud bucodental en las actividades de la vida cotidiana.
  • Controles  periódicos: motivación y refuerzo.

Conclusiones

La diferencia entre el tratamiento de un paciente especial y resto de los pacientes es el tipo de relación que se establece con ellos. Su abordaje y tratamiento vendrá condicionado por el tipo de discapacidad que presente y su grado de colaboración.

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